Tratamiento y equilibrio orgánico
El tratamiento del Parkinson puede dividirse en dos tipos, pero es importante recalcar que la EP evoluciona de manera diferente en cada persona, por lo que el tratamiento debe estar enfocado a la evolución y las características que presenta cada persona de forma individual.
Tratamiento farmacológico
A día de hoy no se conoce un tratamiento curativo para la EP. La medicación se centra en reestablecer la cantidad de dopamina en el cerebro, con el objetivo de mejorar los síntomas y la calidad de vida de la persona. La elección del medicamento depende de factores como la edad, las características clínicas, la gravedad de la EP y los trastornos asociados. En función de las necesidades, se puede emplear una combinación de fármacos para conseguir un control más eficaz de los síntomas
Precursor dopamina
Sinemet® Duodopa® Madopar® Stalevo®
Agonistas de la dopamina
Doporgin® Parlodel® Sogilen® Mirapexin® Requip® Neupro parches® Apo-go®
Inhibidores MAO
Azilect® Plurimen® Xadago®
Anticolinérgicos
Kemadren® Artane®
Tratamiento quirúrgico
Estimulación cerebral profunda (ECP) HIFU
Amantadina
Amantadina Lvel®
Tratamientos no farmacológicos
Este apartado se centra en las terapias no farmacológicas que complementan el tratamiento médico del Parkinson, mejorando la progresión de la enfermedad y la calidad de vida de las personas afectadas. Entre las más reconocidas encontramos:
- Fisioterapia: Fundamental para mantener la movilidad, la fuerza y el equilibrio, reduciendo así el riesgo de caídas y mejorando la independencia funcional.
- Psicología: Brinda apoyo emocional para gestionar el estrés, la ansiedad y la depresión, comunes en la enfermedad de Parkinson. También ayuda a las personas y sus familias a adaptarse a los cambios y afrontar los desafíos de la enfermedad.
- Logopedia: Trabaja en los problemas de habla, voz y deglución que pueden surgir con el Parkinson, mejorando la comunicación y la capacidad para tragar alimentos.
Es importante destacar la existencia de programas de terapia específicos diseñados para personas con enfermedad de Parkinson, los cuales han demostrado ser muy efectivos para mantener y mejorar determinados síntomas.
Hábitos alimenticios saludables
Junto con las terapias, mantener una dieta sana y equilibrada es crucial para el bienestar de las personas con Parkinson.
Una alimentación adecuada, rica en nutrientes y baja en azúcares y carbohidratos refinados, facilita la absorción de la medicación, ayuda en el estreñimiento, mejora la inflamación y previene otros problemas comunes en el Parkinson.
Confía en Aspargi
Confía en nuestra asociación para recibir las terapías no farmacológicas y el asesoramiento o derivación a profesionales adecuados para tu caso. Te acompañaremos en cada paso del camino hacia una mejor calidad de vida.